La Colección Pérez Simón inicia su gran desembarco en Madrid
El Ayuntamiento de la capital abre boca antes de ser sede 'permanente' de cientos de sus fondos (el acuerdo está aún sin firmar) con una exposición de 70 obras maestras
Juan Antonio Pérez Simón lega su gran colección de arte

Juan Antonio Pérez Simón, junto a una de las obras maestras de su colección, 'Las rosas de Heliogábalo', de Alma-Tadema
Madrid es, desde hace años, un imán para los coleccionistas, convertidos hoy en los nuevos Médici. Lleva tiempo buscando en la ciudad sede para sus obras la italiana Patrizia Sandretto Re Rebaudengo y también lo intentó Ella Fontanals-Cisneros, que finalmente parece ... haber tirado la toalla. Sí ha logrado hacerse un hueco en la Milla de Oro del Arte Juan Antonio Pérez Simón (83 años), empresario español de nacimiento y mexicano de adopción. Concretamente, será en el Espacio Cultural Serrería Belga, a unos pasos de CaixaForum Madrid.
En noviembre de 2023 el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, y el empresario y mecenas manifestaron su interés mutuo en que Madrid fuese sede permanente de la Colección Pérez Simón. Pero aún no está cerrado el acuerdo, se está ultimando. «Está muy cerca. Los equipos del Ayuntamiento y los representantes de la Colección Pérez Simón están trabajando arduamente», advierte María José Barrero, coordinadora general de Cultura del Ayuntamiento de Madrid. No da más pistas, ni siquiera si será o no antes de fin de año.
Aún no sabemos cuál será la fórmula jurídica elegida (seguramente, un comodato, préstamo gratuito). Dependerá del periodo de vigencia de la cesión de las obras y de cuáles se seleccionarán finalmente. Se dijo que sería una cesión permanente, pero es posible que sea a muy largo plazo. Tampoco está cerrado el número de obras (quizás entre 200 y 300), que rotarán. Lo que sí se conoce es que remodelarán el Espacio Cultural Serrería Belga los mismos arquitectos que en 2012 devolvieron a la vida este singular edificio, que albergó Medialab: el estudio Langarita Navarro Arquitectos. Ya están trabajando en el proyecto. Se prevé que las obras comiencen en el segundo semestre de 2025. Además, se rehabilitarán la plaza y calles adyacentes. Todo ello será financiado por Pérez Simón.
Hasta entonces, y para abrir boca («un prólogo», según el alcalde), llega a la capital la muestra 'Setenta grandes maestros de la Colección Pérez Simón'. Aunque se anunció que iba a celebrarse en el Fernán Gómez Centro Cultural de la Villa, este espacio quedó descartado y finalmente se exhibe en CentroCentro, del Ayuntamiento de Madrid. Aquí ya recalaron otras destacadas colecciones privadas: Casa de Alba, Abelló...
El alcalde de Madrid se deshizo esta mañana en elogios al coleccionista y mecenas: «En Madrid te consideramos un madrileño más, siempre te llevaremos en el corazón» y anunció que durante las próximas fiestas de San Isidro recibirá el «reconocimiento institucional que merece» por su generosidad con esta ciudad. Sobre el futuro acuerdo, tan solo dijo que «en las próximas décadas podremos disfrutar en Madrid de una de las mejores colecciones del mundo, que se establecerá en la ciudad. Y esta exposición es un prólogo de ese gran acontecimiento cultural». Juan Antonio Pérez Simón, que estuvo acompañado por su hija, María José, se siente muy satisfecho de estar en Madrid, «la gran capital, con una gran oferta cultural». Sobre la exposición, nos invita a «dejarnos seducir por la belleza y entender el alma de los artistas».
La exposición reúne, hasta el 12 de enero de 2025, setenta obras maestras (una por artista, ninguna escultura), muchas inéditas en España, procedentes de esta espléndida colección (en 2010, la revista 'Paris Match' dijo que era la colección privada de mayor calidad del mundo), compuesta por más de 4.500 obras (pintura, dibujo, escultura, manuscritos..., además de una biblioteca con más de 50.000 volúmenes). En las cartelas de las obras expuestas consta así la propiedad de las mismas: Colección Fundación Pérez Simón.
Constituye un recorrido por más de cinco siglos de Historia del Arte, del XVI al XXI: de Lucas Cranach el Viejo a Antonio López. El precio de la entrada: 7 euros (5 euros, la reducida). Pérez Simón ha corrido con todos los gastos de la exposición: transporte, seguros, vigilantes... Ha desembolsado 1,7 millones de euros. El Ayuntamiento de Madrid aporta 19.000 euros para gastos estructurales de estas salas y la publicidad de la muestra. Los beneficios de taquilla y venta de catálogos se repartirán entre ambas partes.
Susana Martínez-Garrido, coordinadora y comisaria de la muestra, junto con Graciela Téllez y Roberto Fernández Castro, ha planteado un recorrido dividido en secciones cronológicas. En todas ellas hay presencia española. Arranca la visita con un espacio a modo de preámbulo en el que se proyecta un audiovisual de Pérez Simón (lo vemos en algunas de sus residencias, con su familia, siempre rodeado de arte) y donde cuelgan dos pinturas: 'Retrato del Príncipe Carlos Luis', de Van Dyck, y 'El filósofo', de Ferdinand Bol.
La primera de las salas acoge desde el Renacimiento europeo hasta finales del siglo XVIII: 'Caridad', de Lucas Cranach el Viejo (ca. 1537), Bronzino, Pieter Brueghel el Joven ('San Juan Bautista predicando en el desierto'), Rubens (una Virgen con el Niño), Canaletto (una vista del Palacio Ducal de Venecia), El Greco (una miniatura, 'Cabeza de Cristo'), Van Dyck, Tiepolo, Joshua Reynolds, Gainsborough... A ellos se suman maestros españoles como Murillo ('San Juan Bautista adolescente'), Juan Pantoja de la Cruz ('Retrato de Felipe II') o Goya, con su 'Retrato de María Teresa de Vallabriga. Recientemente, Pérez Simón ha adquirido otro Goya. Esta colección atesora dos de los mejores conjuntos de pintura novohispana. Se exhiben 'Nuestra Señora de Guadalupe', de Manuel de Arellano, y una pintura de castas del Círculo de Juan Rodríguez Juárez.
El siglo XIX conforma el corazón de la muestra, con el mayor número de préstamos. Pérez Simón siente debilidad por la pintura británica, con maestros como Turner, presente con una preciosa acuarela. Atesora el fondo privado de arte victoriano más importante fuera de Gran Bretaña. Además, incluye importantes fondos prerrafaelitas. Hay préstamos de Rossetti ('Venus Verticordia'), Leighton ('Niñas griegas recogiendo guijarros junto al mar'), Millais, Waterhouse, Cabanel ('Cleopatra probando venenos en los condenados a muerte')... Una de las pinturas más célebres es 'Las rosas de Heliogábalo', de Alma-Tadema, obra capital de este periodo. Cuentan que se la quiso comprar un jeque. Le hizo varias ofertas a Pérez Simón; la última, un cheque en blanco. No aceptó.
También hay presencia del impresionismo y el postimpresionismo, con maestros de ambos movimientos, como los cotizadísimos Van Gogh, Cézanne, Gauguin, Sisley, Monet... La Colección Pérez Simón refleja sus gustos estéticos, sus conocimientos, su historia: la familia, la naturaleza, la belleza femenina, su afición por los grandes personajes de la Historia... Cada obra representa una etapa, un período de su vida: «Las obras de Léon-Augustin Lhermitte y Jean-Baptiste Camille Corot, por ejemplo, evocan mis sentimientos más profundos hacia la familia y la naturaleza. Los de Bouguereau y Tamara de Lempicka sugieren mi atracción por la belleza femenina y el erotismo. Así como los cuadros de Goya o Cabanel, entre otros, expresan mi interés por la vida de personajes históricos. En cuanto a Monet y Sisley, sus lienzos luminosos me recuerdan a Asturias...», comentaba en una entrevista con 'Paris Match' en 2010. «Los amo a todos como a mis hijos».
«Las colecciones, dice Pérez Simón, han sido siempre un autorretrato simbólico de sus dueños, de sus pasiones y aficiones más íntimas». Así, 'La forrajera', de Pissarro, le recordaba a su abuela, cuando se marchó de España siendo niño, y el 'Retrato de Lucie Bérard', de Renoir, a su nieta. Ambas obras lucen juntas en la exposición. El XIX español está representado con Madrazo, Zuloaga, Romero de Torres, Anglada Camarasa, Sorolla...
José Luis Martínez-Almeida y Juan Antonio Pérez Simón
Finalmente, la exposición concluye con las vanguardias y el siglo XXI. Nombres como Munch, Tamara de Lempicka, Diego Rivera, Frida Kahlo, Picasso, Braque, Kokoschka, Magritte, Dalí ('La ascensión de Cristo'), Pistoletto, Barceló, Manolo Valdés, Alex Katz, Rothko... Esta última, protegida con un cristal, fue la última obra en llegar a CentroCentro. Se colgaba este mismo lunes. Hay en la muestra espléndidos conjuntos de retratos y desnudos femeninos. Para la salida de 'Niña tehuacana. Lucha María', de Kahlo, hubo que tramitar un permiso temporal de un año al Instituto Nacional de Bellas Artes mexicano, al ser esta artista monumento artístico nacional. No así en el caso del cuadro de Diego Rivera 'Acueducto', que nunca estuvo en México. Está depositado en el Museo de San Diego.
«Es una colección en construcción, que sigue creciendo», advierte Susana Martínez-Garrido. «Es fruto de un gusto innato que se fue alimentando con el conocimiento; Pérez Simón es un gran lector», añade Graciela Téllez. A lo largo de la Historia, los coleccionistas se han sentido atraídos por el arte de su tiempo. Así ocurrió con el Papa Julio II y su encargo a Miguel Ángel para la Capilla Sixtina. A Pérez Simón también le interesa el arte contemporáneo. La visita acaba con obras de los japoneses Yoshitomo Nara y Takashi Murakami, los chinos Zhang Xiaogang y Zeng Fanzhi (los descubrió en un viaje a Asia, donde mostró parte de su colección) y el español Antonio López, al que admira mucho. Adquirió una de las siete vistas de la Gran Vía, desde distintos puntos, pintada por el de Tomelloso: 'Gran Vía, 1, agosto, 7:30 horas' entre 2010 y 2015.
Obras de la Colección Pérez Simón ya se habían visto en Madrid en dos exposiciones en el Museo Thyssen: 'De Cranach a Monet. Obras maestras en la Colección Pérez Simón', en 2006, y 'Alma-Tadema y la pintura victoriana en la Colección Pérez Simón', en 2014. Además, ha habido en estos años préstamos al Prado, el Reina Sofía, el Museo Sorolla, el Palacio Real, la Fundación Mapfre y CaixaForum. «Uno de mis grandes placeres es mostrar las obras al público. Nunca rechazo un préstamo», advierte el mecenas.
Juan Antonio Pérez Simón nació en Turanzas (Asturias) en 1941. A los cinco años emigró con su familia, primero a Cuba y después a México, donde desarrolló su carrera junto a su socio y buen amigo el multimillonario mexicano Carlos Slim, uno de los hombres más ricos del mundo. Ambos fundaron el grupo financiero Carso. Otro de sus grandes amigos fue Rodrigo Uría, quien convenció a Pérez Simón para que mostrara obras en España.
En 1964, un veinteañero Pérez Simón realiza su propio 'Grand Tour' por Europa. En Francia pasa horas en el Louvre, en L'Orangerie... Y se marcha a Arlés, tras los pasos de Van Gogh. Comienza a coleccionar en los 60 reproducciones de las obras que más le gustan. Las primeras, dos reproducciones de obras del Prado: 'Las lágrimas de San Pedro', del Greco y 'Los borrachos', de Velázquez. «Mi pasión por el arte surge desde muy niño. Desde mi juventud me sentí atraído por la belleza, por las obras de arte. Como no podía comprarlas, colgaba en mi recámara reproducciones de los cuadros. Satisfacía así mi deseo de disfrutar la forma en que cada artista plasmaba en su lienzo lo sublime, lo poético, lo bello, hasta lo terrible», relata el coleccionista. Con los años pudo adquirir en subastas, ferias o galerías obras maestras hasta lograr atesorar hoy una de las colecciones privadas más importantes del mundo.
Se casó con Josefina Carrera –con quien tuvo una hija, María José, madre de Jorge y María José, sus dos nietos–, pero se separaron. Mantuvo Pérez Simón una relación con Silvia Gómez-Cuétara, viuda de Luis García Cereceda, a la que pusieron fin este verano. Vive entre Ciudad de México, Madrid y Asturias, donde posee casas. En Madrid, en la lujosa urbanización La Finca; en Ciudad de México vendió su particular Versalles (hoy un hotel) y posee una residencia en la Colonia Roma, que inmortalizó la película 'Roma', de Alfonso Cuarón.